Hace un par de semanas emprendí una aventura viajera que me llevó a Los Ángeles, California. Debo decir que, a pesar de haber estado un par de ocasiones en la ciudad, solo había sido por motivos de vuelos de conexión, así que no había explorado como tal Los Ángeles y visitar la ciudad me generaba curiosidad, por ello la puse en mi lista de destinos en 2021.

Dado que las distancias en L.A. son algo largas, decidí dividir mi estancia en dos: la primera parte en el downtown y la segunda mitad de mi viaje en Santa Mónica.

Aunque Los Ángeles es bastante grande y algunas distancias en definitiva no serán caminables, la verdad es que en el centro si puedes hacerlo y llegar de un lado a otro a pie. Claro, si eres de los que no les gusta caminar ni una cuadra, más vale que tomes transporte, pero considera que los taxis son caros y el uber o lyft también lo es. A pesar de que se dice que L.A. no tiene transporte o buenas conexiones, la realidad es que si las hay, simplemente no es tan frecuente como en otras ciudades, pero te puedes mover en metro o autobús prácticamente en todo L.A. y además en estas fechas (octubre 2021) es gratis en apoyo a la pandemia.

Desde el aeropuerto puedes llegar en transporte público al centro de L.A. por menos de 10 dólares, los traslados individuales en la ciudad tienen un costo de 1.75 USD y para ello debes adquirir una tarjeta que te cuesta menos de 3 dólares.

Aquí te dejo la ruta que yo seguí durante mi estancia de cinco días:

Día 1

Comencé mi viaje instalándome en el centro de la ciudad disfrutando unas vistas hermosas, inmediatamente después de dejar mi maleta me fui a Walk of Fame, mejor conocido como el Paseo de La Fama que, en mi opinión, me pareció bastante soso pues no es más que una calle donde el suelo está lleno de estrellas con los nombres de famosos y la zona, la verdad, no es la más linda. Por mucho, te recomiendo ir a The Grove o Beverly Hills donde el ambiente es totalmente diferente.

Y como mi promesa contigo es contarte la verdad y no adornarte las cosas, debo decirte que si decides ir a L.A. tienes que ir preparado para ver homeless por donde quiera y atestiguar olor a mota en todos lados (tal vez no en las zonas muy fancy). La ciudad no precisamente se caracteriza por ser limpia.

Continué mi visita al observatorio Griffith que tiene, en mi opinión, la mejor vista de Los Ángeles y además puedes apreciar Santa Mónica. Presenciar el atardecer ahí es mágico, aquí también encontrarás el famoso letrero de Hollywood.

Yo no hice ningún trail, pero es una zona muy linda para hacer caminatas o correr y disfrutar de las maravillosas vistas que te ofrecen estos senderos.

Wall of Fame

Día 2

Este día lo dediqué a divertirme en Universal Studios que es un must en tu paso por Los Ángeles. A pesar de no ser un parque de atracciones tan grande como Disneyland, también tiene lo suyo y la pasarás increíble. Te recomiendo probar la cerveza de mantequilla que es una verdadera delicia (¡las calorías lo valen!). Si quieres disfrutar de todas las atracciones más vale que dediques el día entero para sacarle provecho. Un tip si viajas solo es que no hay necesidad de comprar el pase vip, ya que existe una fila exclusivamente para personas que van solas, con lo cual accedes bastante rápido a todos los juegos (¡viajar solo tiene sus ventajas!).

Día 3

Aquí tocó el turno a explorar el centro de L.A. y opté por caminar, ya que, como habrás leído en otros de mis artículos, es una de mis partes favoritas en un viaje y la forma más bonita que considero yo para conocer una ciudad: perdiéndote entre sus calles y admirando lo que en un taxi o bus difícilmente podrías hacer.

Así llegué al Walt Disney Concert Hall, a los museos Moca y The Broad (ambos gratis) hasta llegar al City Hall y la Catedral de Nuestra Señora de Los Ángeles. Aunque no es nada fancy, te recomiendo ir al café Panorama desde donde podrás apreciar unas lindas vistas del corazón de L.A. y ofrece opciones de desayunos a precios accesibles.

No podía faltar el shopping y para ello me fui a dar una vuelta a The Grove que es una hermosa plaza comercial al aire libre con varias tiendas y al lado hay un mercado de productos orgánicos. Este mall se encuentra cerca de Hollywood, por si, desde este punto, decidieras darte una vuelta a Walk of Fame.

Este día también pasé por el museo LACMA y el famoso spot The Urban Light que está lleno de faros y por la noche se ve espectacular.

Día 4

Hacia la segunda parte de mi viaje, me dediqué a explorar Santa Mónica, Beverly Hills y Sunset Strip, este último me gustó mucho, es simplemente un barrio de la ciudad, pero con un estilo y ambiente único.

Comencé la mañana yendo a Santa Mónica Pier y llegué caminando hasta Venice Beach, este recorrido también lo puedes hacer en bici (menos de 3 kilómetros). Si rentas bici puedes llegar incluso hasta Manhattan Beach aunque el recorrido es mucho más largo, o bien, llegar a Manhattan Beach y ahí rentar una bici para llegar hasta Redondo.

Después de llegar caminando hasta Venice Beach me dirigí a Rodeo Drive en Beverly Hills que, para muchos, la expectativa es alta; sin embargo, se trata básicamente de dos calles principales llenas de tiendas de lujo. Aquí te recomiendo ir a la cafetería Ladurée, esta casa de repostería parisina, mejor conocida por sus exquisitos macarrones, ¡mis favoritos! Punto de encuentro, por cierto, con Jay Shetty y Radhi Devlukia en mi visita a L.A.

Día 5

Llegando a la recta final de mi viaje, me reservé el día para ir a Manhattan Beach que, a pesar, de estar algo retirada vale mucho la pena conocerla. Fue la playa que más me gustó, ya que tiene una vibra única y es un lugar idílico, diferente. Puedes caminar por sus calles llenas de casitas americanas, nadar en su playa y comer en uno de sus diversos restaurantes.

En Santa Mónica puedes caminar a todos lados, la zona turística es muy pequeña, pero con encanto. Lo principal es ir a Santa Mónica Pier donde está un pequeño parque de diversiones y varias opciones de restaurantes para comer bastante rico y pasar un día de playa.

También está la opción del Third Promenade que es una calle larga llena de tiendas y opciones para el shopping. De mis restaurantes favoritos de comida asiática y saludable fue el Bibibop ¡te lo súper recomiendo!

¿Qué elegir?

En resumen, todo dependerá de qué te guste, a mi definitivamente me gusta más la playa, por lo que dedicaría más tiempo a ellas y puedes llegar incluso a Malibú o a Long Beach (direcciones opuestas). Debes saber que L.A. no precisamente es barato, pero hay varios trucos para ahorrar.

Otra opción, aunque algo retirada, es ir a Disneyland en Anaheim. Yo, en esta ocasión no fui, ya que anteriormente lo había visitado desde San Diego, pero, sin duda, algo que vale mucho la pena hacer en tu paso por L.A. (me gusta más que Universal Studios y más si viajas con niños).

Para el momento en el que escribo este artículo (octubre 2021) el transporte en Los Ángeles es gratis debido a la pandemia, por lo que representa un ahorro para aquellos que se animen a usarlo. Solo hay algunos que no aplican como el Blue Bus.

Si eres de los que está pensando en ir a vacunarse aprovechando el viaje, no te preocupes, porque a la llegada al aeropuerto de L.A. encontrarás módulos de vacunación donde podrás ponerte la vacuna sin necesidad de haber generado ninguna cita, bastará que te formes y esperes tu turno.

Si quiere saber algún detalle en específico, no dudes en escribirme, me encantará ayudarte.